INDALECIO: El amor de Martín Gómez. Peón joven y con cara de idiota, empleado en el rancho de Martín Gómez.
INDALECIO CRUZ: Usted tiene ojos de mujer fatal. Tipo de unos 30 años, que habla con marcadísimo acento argentino. Es autor de tangos y chófer de Sergio, para estudiar sus procedimientos de conquista. Acaba enamorando a Francisca, a la que trata con desprecio y casi con violencia.
INDIA, UNA: El descubrimiento de América. Mujer indígena que se vislumbra a través de la vegetación, de bastante buen ver. Salcedo y Juan de la Cosa van tras ella y al poco la traen, desnuda. Colón la reclama para sí y finalmente se la lleva detrás de unos matorrales, a “enseñarle castellano”.
INDIVIDUO, UN: Carlo Monte en Montecarlo. Personaje que juega en el Casino y no hace más que perder.
INÉS: Las siete vidas del gato. Criada de unos 22 años, que sirve a Clotilde, una de las jóvenes asesinadas.
INFANTE DON JUAN, EL: La hazaña de Guzmán el Bueno. Infante mamarracho que rapta al hijo de Guzmán el Bueno, pretendiendo cambiar su vida por la plaza de Tarifa, a lo que don Alfonso no accede a pesar de tratarse de su propio hijo.
INGLÉS: Carlo Monte en Montecarlo. Tipo de la buena sociedad, con pinta de turista, asquerosamente vestido, que pide su cámara de fotos para tomar unas instantáneas desde la terraza de un café, sin intervenir apenas en los diálogos, salvo un par de frases cortas.
INGLESA: Carlo Monte en Montecarlo. Mujer de la buena sociedad asquerosamente vestida, con pinta de turista, que toma el fresco en la terraza de un café. Al parecer se llaman Agata y su participación en los diálogos es prácticamente nula.
INOCENCIA: No se culpe a nadie de mi muerte. Inocencia de las Torres Medioevales es hermana de Narciso y por tanto marquesa también. Tiene unos 40 años y es listísima. Por ayudar a su hermano ha tenido que renunciar a bastantes cosas en la vida, en especial al amor.
INQUISIDOR ROCABERTI, EL: El embrujamiento de Carlos II. El inquisidor general es un tipo alto, huesudo y con cara de calamar anémico. Conversa con fray Froilán y fray Antonio Álvarez acerca de la salud mental del monarca. Cuando aparece el diablo, se tira al suelo y se hace el difunto.
INSPECTOR 1º: Carlo Monte en Montecarlo. Sujeto llamado Ernesto que vigila una de las mesas del Casino de Montecarlo. Vuelve a intervenir la noche en que se inaugura la temporada de verano.
INSPECTOR 2º: Carlo Monte en Montecarlo. Sujeto llamado René que vigila una de las mesas del Casino de Montecarlo.
INTENDENTE: Carlo Monte en Montecarlo. Tipo apellidado Croupillot, encargado de la jefatura de policía del Principado. Su participación es más bien escasa.
INTÉRPRETE: Es peligroso asomarse al exterior. Hombre de unos 30 años, muy amable, empleado en el hotel Biltmore de Nueva York, que explica a Federico, en perfecto castellano, que tiene ya preparada la conferencia con Madrid que había solicitado.
ÍÑIGO: El pecado de doña Clara. Don Íñigo de Antequera tiene una cara despachurrante. Se ha casado cuatro veces, y en las tres ocasiones anteriores ha matado a sus esposas por las infidelidades de éstas. Lo mismo hace con su actual esposa, doña Clara, a la que clava una daga. Posteriormente él morirá de un extraño ataque.
ISAAC: Las cinco advertencias de Satanás. Isaac Blum es el administrador de Félix, de unos 50 años, de ascendencia judía aunque nacido en Polonia. Viste y se comporta siempre teniendo presente su afán ahorrador, lo que le ha permitido además ser muy rico. Cada peseta que sale de la caja le cuesta una enfermedad, y cada gasto que hay que hacer le parece inútil. Al final acaba ligado sentimentalmente a Alicia, una antigua novia de Félix.
ISABEL: Es peligroso asomarse al exterior. Muchacha de 25 o 26 años, esbelta y elegante. Domina varios idiomas y ha viajado mucho. Conoce en diversos lugares y circunstancias a Gerardo y sus dos hijos, Federico y Mariano, de los que se enamora y con los que se promete en matrimonio, desconociendo sin embargo la relación existente entre ellos.
ISIDRA: Los tigres escondidos en la alcoba. Doncella particular de Nelly, con carilla de golfo pero atractiva. Apodada “Veneno”, debido a la forma en que lanza puyas e indirectas, le gusta Teófilo, al que quisiera ver de jefe.
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